martes, 8 de diciembre de 2009

Paréntesis


Ilustración: Siega del heno (Natalia Goncharova)

Escuchando: One of these mornings (Moby)



En mi memoria:

“Uno de estos días,
no será dentro de mucho,
me buscarás
y me habré ido”.


(De la canción anterior)

“Todo tiene su momento oportuno; hay un tiempo para todo lo que se hace bajo el cielo: un tiempo para nacer, y un tiempo para morir; un tiempo para plantar, y un tiempo para cosechar...”

(Eclesiastés 3, 1-2)




Es inquietante saber que vivimos bajo un cielo de estrellas fijas que no sabemos de donde han salido. En las noches despejadas, como la de hace unas horas, puedes mirar al cielo y encontrarlas de repente sobre tu cabeza, formando constelaciones que rigen nuestro futuro.

Llevo unas semanas que no sé qué estrella me ha picado. O puede que, simplemente, sea el tiempo inmisericorde el que me ha atravesado de una parte a otra como un rayo. Lo cierto es que he vuelto al punto de partida de hace tres años y, de nada, o de muy poco, ha servido tanto aprendizaje.

No sé si he cultivado lo que no debía o simplemente lo he hecho fuera del período de siembra. Lo que no puede negarse ya es que he perdido la cosecha entera, aunque me negaba a reconocerlo, asustado por el trabajo que me espera tras el descanso forzoso que supone esperar a que las tierras se recuperen para intentar la nueva siembra.

O tal vez sea el momento de cambiar la desagradecida tierra que cultivo por otra que seguro que existe un poco más allá, aunque sea bajo el mismo cielo de estrellas fijas.



kuko-

4 comentarios:

María Antonia Ricas dijo...

Te leo siempre te digo lo mismo, pero es así

Anónimo dijo...

Hoy más besos. Jade

Anónimo dijo...

Lánzate...

La última vez que escuché este tema un cubilete de chicles se enfriaba en la curiosa nevera de un peeeaasssooo de coche... :D

:*

Anónimo dijo...

Me gusta tu blog todo.
No lo quiero decir cada día que escribes algo nuevo.
Un abrazo.
Sara