viernes, 22 de agosto de 2008

Recuerdos


Ilustración: Jóvenes y un pescador (Alfonso Ponce de León)

Escuchando: On saturday afternoons in 1963 (Rickie Lee Jones)



En mi memoria:
“En la vida has ido conociendo algunas cosas pero has fallado en lo esencial, es decir, has fracasado. Esa idea te deprime y entonces es cuando buscas apresuradamente un remedio para poder arrastrar con dignidad el futuro. Ahora no tendré a nadie a mano cuando me asalte el miedo.”

(Mujer de rojo sobre fondo gris - Miguel Delibes)




Durante estos días, y sin propósito previo, me vi paseando por la calle que me acogió en mi primer año de Universidad.

Aunque parezca mentira, casi todo estaba en su sitio. Desde el bar donde nos desintoxicábamos del estudio hasta los billares en donde nos jugábamos la merienda en los futbolines contra algún incauto pasajero del buque con destino a Orán.

Para mí era entonces una ciudad que pasaba de ser tíbia y húmeda a seca y fría en sólo un minuto. Ahora ya no le guardo tanto rencor.

Me recuerdo con los pesados libros casi siempre bajo el brazo, y los dedos doloridos de tomar apuntes. Ahora recreo aquellas fechas como un larguísimo otoño, y me viene a la mente el olor de los mejillones al vapor recién traídos de la lonja y aquella cerveza tan fría.

Han pasado ya muchos años, muchos. Seguramente no soy como entonces pensaba que sería. Lo digo con la misma certeza con la que adivino que, si algún día llego a jubilarme, las cosas no serán como imagino ahora.

Pero, al fin y al cabo, el viaje no está siendo malo. Tocaremos madera.




kuko